La periodista Federica Tourn fue la primera ganadora del Premio Piazza Grande, que fue lanzado en 2019 por la Asociación Internacional de Periodistas de Religión (IARJ) y la Fondazione per le Scienze Religiose Giovanni XXIII (FSCIRE) para fomentar las mejores prácticas en el periodismo y honrar el trabajo de los periodistas que cubren la religión y la espiritualidad. En el marco de la Academia Europea de Religión 2019, Tourn fue galardonada por su artículo, Dios entre rejas (Dio dietro le sbarre), publicado por la revista católica Jesus. Su artículo examinaba la falta de servicios religiosos en las cárceles italianas.

Más información sobre el premio y presentación de obras antes del 31 de mayo de 2023 Requisitos y preguntas frecuentes: Premio Piazza Grande de Periodismo Religioso 2023 - Asociación Internacional de Periodistas de Religión (theiarj.org)

Como periodista independiente, Tourn cubre temas de religión, derechos humanos, feminismo e inmigración. Ha trabajado en países como Siria, Ucrania, Namibia y Bosnia.


La periodista independiente italiana Federica Tourn frente a una pared exterior blanca y desgastada.
La periodista independiente italiana Federica Tourn.

Pregunta:

¿Por qué eligió el periodismo, y en concreto informar sobre religión?

Contesta:

Siempre quise escribir, y el periodismo me pareció desde muy joven una oportunidad para expresar el mundo real con palabras. También quería viajar y escribir sobre gente diferente a mí, centrándome en las injusticias y las desigualdades sociales.

En resumen, quería intentar dar voz a los sin voz. Así que dedicarme al periodismo social y a los derechos humanos fue una elección natural. La religión también es una parte esencial para entender la vida de las personas y las sociedades.

También hubo un elemento de azar. Mi primera colaboración, cuando tenía 19 años, fue con el semanario de la diócesis católica de mi ciudad: aquí di mis primeros pasos y aprendí no sólo los rudimentos del periodismo, sino también cómo funciona la Iglesia católica. Luego, en los años siguientes, como freelance y como protestante en un país católico, seguí trabajando con diversos grupos religiosos. A menudo sucede así en la vida: Empiezas casi por casualidad en un tema, y cuanto más lo conoces, más continúas estudiándolo, porque el estudio en profundidad nunca termina.

Pregunta:

¿Cuáles son los principales retos a los que se ha enfrentado como mujer en este campo?

Contesta:

Las mujeres son tan capaces y pueden ser tan hábiles como sus colegas masculinos, por lo que deberían poder ocupar cualquier puesto, desde corresponsal hasta directora de un periódico. El hecho de que las mujeres sigan estando infrarrepresentadas en los niveles directivos o en otros puestos de responsabilidad es un problema que, por desgracia, sigue aquejando a nuestro negocio. El reto es doble: intentar trabajar en un sector, el de la edición y el periodismo, que atraviesa una crisis importante desde hace años y que, por tanto, ofrece cada vez menos oportunidades de empleo, e intentar hacerlo como mujer. La dificultad a la que se enfrentan las mujeres en el mercado laboral queda patente en los datos de Italia.

Pregunta:

Usted ganó el primer Premio Piazza Grande. Qué significado tiene para usted?

Contesta:

Fue un reconocimiento muy importante. Como autónoma, para mí fue aún más significativo. Fue una valiosa confirmación de que mi trabajo es significativo para los lectores.

Pregunta:

Su artículo denuncia la falta de servicios religiosos en las cárceles italianas. ¿Podría decirnos algo más?

Contesta:

La fe de una persona, mientras cumple condena en prisión, es a menudo la única fuente de esperanza y resistencia. No es casualidad que se produzcan tantas conversiones en la cárcel. En las cárceles italianas, sin embargo, si no se es católico, sigue siendo muy difícil obtener consuelo religioso de un representante de la comunidad de fe. De hecho, a pesar de que la libertad de culto entre rejas es un derecho, en Italia sigue existiendo una discriminación de facto entre los capellanes, que están presentes en todos los centros penitenciarios de forma permanente, y los ministros y líderes religiosos de otras confesiones, que sólo tienen acceso a la cárcel previa petición expresa del preso y tras no pocas dificultades burocráticas.

Además, todas las prisiones disponen de una capilla donde se pueden celebrar misas, mientras que sólo el 23% de los establecimientos penitenciarios tienen espacio para otros servicios, con el resultado de que los presos se ven obligados en la mayoría de los casos a rezar encerrados en sus celdas. Esta discriminación entre católicos y creyentes de otras confesiones no refleja ciertamente el pluralismo religioso.

Pregunta:

Por último, ¿puede decirnos algo más sobre su visión del periodismo religioso en el mundo contemporáneo?

Contesta:

Las religiones desempeñan un papel fundamental en la sociedad contemporánea y, desde una perspectiva laica, ofrecen una importante clave interpretativa de la sociedad y la política actuales, incluso dentro de países secularizados. Al ofrecer la visión de las comunidades religiosas y restaurar la pluralidad de sus voces, el periodismo religioso contribuye a una imagen más completa de nuestro mundo contemporáneo. Por último, restaurar la riqueza de las diferentes culturas religiosas es sin duda una contribución indispensable a la coexistencia y al respeto recíproco frente a los prejuicios, el fundamentalismo y el fanatismo.

Pregunta:

Como comunidad de periodistas, ¿cómo podemos mejorar nuestra información sobre religión?

Contesta:

Como periodistas religiosos, tenemos que seguir buscando la exactitud informándonos cada vez mejor sobre lo que ocurre en nuestro mundo. Tenemos que seguir estudiando y aprendiendo hablando con la gente.

Todos tenemos prejuicios que debemos evitar. Cuando informamos sobre religión, podemos vernos influidos por supuestos políticos, patriarcales y coloniales que hay que deconstruir.

La mejor manera de conocer el trabajo en curso de Federica Tourn es seguirla: